Las mismas cuentan con 32 celdas de alojamiento, distribuidas en 4 módulos metálicos en torno a un patio central de acceso.
Se trata de una obra que se enmarca en el plan de infraestructura penitenciaria que impulsó el gobierno de la provincia de Buenos Aires.
Este Plan incluye la puesta en marcha de alcaldías y la ampliación de 12 mil plazas carcelarias. La mitad de lo construido en la Provincia en 200 años.
De esta manera, la Provincia desarrolla mejoras en condiciones carcelarias según estándares internacionales y las Reglas Mandela.
Este nuevo lugar de detención incluye más de 3.500 mil metros cubiertos, de los cuales la mitad son espacios al aire libre bajo área de seguridad.