La ciudad de La Plata es la única capital provincial que no cuenta con un aeropuerto operativo. Si bien posee uno que funciona bajo la órbita del gobierno bonaerense y hasta tiene escuelas de vuelo, el mismo dista de poder recibir aviones comerciales de gran porte y, mucho menos pasajeros. Hace algunos años atrás, la desaparecida aerolínea LAPA supo aterrizar y despegar desde la terminal platense con aviones Fairchild Swearingen Metro II de 19 plazas.
El predio donde se ubica la estación aérea de 13 y 610 tiene características únicas que serían la envidia de cualquier otro aeropuerto del país. Emplazado en un campo de 400 hectáreas, posee dos pistas, una de apenas 1190 metros de largo y que es inoperable. La misma debería ser repavimentada unos 1100 metros más para hacerla similar a la del Aeroparque Jorge Newbery, que hasta antes de las últimas reformas obras que se reinauguraron en marzo del año pasado, alcanzaba los 2300 metros de longitud. Hoy llega a 2700 metros de largo y 60 de ancho.
La segunda pista, cuenta con 1427 metros, de los cuales hay 151 que no están operables porque “la cabecera se encuentra desplazada”. De esta forma, sería necesario correrla y extenderla. Teniendo en cuenta ese dato, quedarían apenas 1276 metros para que aviones como los que operan en Aeroparque puedan aterrizar o despegar. Es decir, Boeing 737 o Airbus A320, por citar dos ejemplos.
Sin embargo, la conectividad de la terminal aérea fue puesta en el eje del debate y realizar obras donde se encuentra emplazado actualmente o su traslado (se habla de terrenos al costado de la Autopista La Plata-Buenos Aires) sería otra de las alternativas a considerar.
Pero quizás el principal punto crítico es el acceso al aeropuerto platense. La avenida principal de acceso, que es la 13 es de doble mano en la entrada a la terminal, pero tiene un sector donde no se respetó la traza y las casas están casi pegadas a cinta asfáltica, lo que sería imposible pensar en un ensanche. Por el lado de avenida 7 el panorama es un poco mejor, pero también cuenta con problemas. Todo eso sin contar que quienes vengan desde el conurbano al aeropuerto, deberían cruzar prácticamente toda la ciudad, ya que no existe una circunvalación. Lo mismo sucedería con los ciudadanos platenses.
En cuanto a la infraestructura, la actual terminal tiene apenas 60 m2. La misma debería albergar pasajeros, pero no cumple con ningún requisito mínimo y se encuentra en un total estado de abandono. En una misma situación está la torre de control que es totalmente obsoleta.
Guerrera aseguró que "es probable que conjuguemos el aeropuerto con la terminal, haciendo una conectividad virtuosa” y sostuvo que la posibilidad de reubicación del aeropuerto responde a que “quedó en un lugar poco cómodo y accesible, no tanto para los platenses, sino para quienes vienen a visitarla o por trabajo”.
“La lógica es poner la terminal en un lugar donde haya posibilidad de interconexión, combinarla con el aeropuerto por eso estamos detrás de un proyecto que combine ambas cosas”, indicó y aclaró que, de concretarse, el proyecto deberá ser trabajado en conjunto con los municipios de Ensenada y Berisso.
"Estamos trabajando para que el gobernador haga los anuncios pertinentes", anunció el exintendente de General Pinto. "La Plata necesita tener su aeropuerto y una terminal acorde a las necesidades y no lo que tenemos hoy en el centro, donde cuesta entrar con un micro de larga distancia", destacó.
"La Plata necesita tener su aeropuerto y una terminal acorde a las necesidades y no lo que tenemos hoy en el centro, donde cuesta entrar con un micro de larga distancia", finalizó el ministro durante la recorrida de las obras que se realizan en el techo de la estación de trenes de la capital provincial.
Promesas que quedaron en la nada...
En 2011 el entonces gobernador Daniel Scioli y el exintendente Pablo Bruera prometieron reactivar el aeropuerto de la capital bonaerense. Si bien hicieron un anuncio con bombos y platillos, el mismo quedó en la nada misma.
Pero sería recién al año siguiente, cuando el actual embajador argentino en Brasil anunció la obra de repavimentación para extender la pista de 1.427 metros a 2.367 metros, además del sellado de fisuras y la señalización horizontal en toda su superficie y de las pistas auxiliares. Para ello, la Secretaría General de la Gobernación a cargo de Luciano Di Gressia destinó un presupuesto de $ 20.149.974. Pese a la euforia del anuncio, las obras nunca se realizaron. Sólo queda el recuerdo de los funcionarios recorriendo el predio para sacarse fotografías.
En ese momento, la obra quedó a cargo de la empresa Marín - Cominsa, que en un plazo de 180 días debía realizar el recapado, refuerzo, balizamiento y extensión de la pista principal, la cual pasaría a tener una longitud de 2.400 metros, precisamente como el aeroparque metropolitano. Pero nada de eso ocurrió.
Tras la firma del contrato, el entonces intendente Bruera, resaltó que “todos los gobernadores (que precedieron a Scioli) intentaron hacer el aeropuerto y lamentablemente no se pudo hacer” y calificó ese día como “histórico para la ciudad”.
2019 y una nueva esperanza
En mayo de ese año, una desconocida empresa Low Cost (Polar Líneas Aéreas) colocó a la ciudad de La Plata entre sus rutas y aseguró que sería posible volar desde el predio de 7 y 610 hasta varios destinos nacionales e internacionales, entre ellos, Río de Janeiro. Sin embargo todo quedó en un anuncio, al menos hasta ahora.
El pedido del Arzobispo Víctor Manuel "Tucho" Fernández
Todas esas promesas sin cumplir, provocaron que hasta el Arzobispo de La Plata Víctor Manuel Fernández tomara cartas en el asunto. A través de una solicitada pidió que "no condenen a la ciudad a ser la cenicienta de Capital Federal" y puso como ejemplo a "Viedma que tiene 80.000 habitantes (diez veces menos que La Plata), Santa Rosa que tiene 105.000 habitantes y San Juan tiene que 115.000 habitantes. Las tres poseen aeropuertos activos”, aseguró el prelado platense.
El anuncio de Garro
En marzo de 2019 y tras brindar su discurso que dio inicio al año legislativo en el Concejo Deliberante de la capital bonaerense, el propio jefe comunal aseguró que “empezamos a conversar con los Ministros de Transporte (Mario Meoni) y Obras Públicas de la Nación (Gabriel Katopodis)”. También se mostró cauto sobre el anuncio: “No quiero anunciar nada concreto, pero me veo en la obligación de decir que me he sentado para trabajar en esto”, advirtió.
De todos modos, Garro adelantó que "por primera vez veo que hay un diálogo y una voluntad para que La Plata tenga el aeropuerto . Después podemos discutir dónde va. Si en 7 y 610 o en algún lugar al costado de la Autopista entre Tolosa, Villa Elisa, para el lado del río, por una cuestión de accesibilidad y por el caudal de usuarios".
Una vez más, funcionarios bonaerenses volvieron a pronunciarse sobre un tema que lleva décadas y que necesita una urgente solución para el millón de habitantes de la ciudad de La Plata.