"Es lamentable que en un contexto en el que miles de personas eran privadas de despedir a sus familiares y amigos que morían, se cerraban comercios en todo el país, se fundían empresas y las escuelas se mantenían cerradas, el presidente participaba de un festejo que no respetaba las disposición dictaminadas por él mismo", remarcaron los legisladores.
En ese sentido, los senadores sostuvieron que se trató de "una ofensa a la nación entera que hizo un inmenso esfuerzo para cumplir con lo que decretó el presidente que muy sonriente posa para una foto sin cumplir los protocolos, ni las medidas restrictivas vigentes en ese momento" y agregaron: "el gobierno planteaba una visión extrema del asunto que puertas adentro incumplía, mientras ubicaba a los dirigentes opositores en un rol de perturbadores de la salud pública cuando planteábamos la problemática de la pérdida del empleo y la deserción escolar".
"El presidente debe dar las respuestas del caso a la sociedad y pedir perdón por haber burlado la buena voluntad de los argentinos", concluyeron los senadores de Juntos.