Consultado sobre que lo motivó a aplicarse la vacuna de Pfizer y en qué momento tomó la decisión, Garbin aseguró que “el motivo principal es que encontremos la vacuna pronto, para que sea efectiva, se pueda distribuir masivamente y que acabe pronto esta pesadilla. Se puede decir que siempre quise hacer el bien, contribuir para la sociedad que me dio la posibilidad de estudiar. Yo sabía que el estudio era mi única arma para progresar en la vida, le debo mucho a mi país y contribuyo para que avance. Además, como científico, sabía cómo era el desarrollo de la vacuna y me quedaba más tranquilo a la hora de ponérmela”.

“Es una vacuna que tiene un método ARN mensajero, innovadora y conocía a gente del equipo del doctor Polak que son colegas míos. Ellos me invitaron, y eso me dio más tranquilidad para ser voluntario y para contribuir con el avance de la vacuna y de mi país”, explicó quien además es profesor de Biología en la Universidad Nacional Arturo Jauretche

Por otra parte, Garbin, quien también es cantante y compositor, se refirió a qué efectos sintió tras aplicarse la dosis y, en ese sentido, manifestó: “tuve dolor en el brazo izquierdo, en el lugar del pinchazo. Básicamente dolor muscular hasta el otro día. También sentí un poquito de decaimiento y dolor de garganta a la semana, pero nada más que eso. No levanté fiebre, se puede decir una febrícula, que llegó a 37,2°, pero nada que me haya trastornado demasiado. Son unas molestias que son mucho más leves que sufrir el coronavirus. Quiero agregar que nos dan un diario para reportar los síntomas. Es un celular con una aplicación para que vayamos rellenando”.

Sobre el proceso para ser voluntario, el investigador indicó que “el gobierno publicó una página web, aunque ya cerró la inscripción. Sin embargo – aclaró- ahora viene la inscripción para la vacuna china y los invito para que participen. Esta vacuna china que la patrocina el Laboratorio CNBG (China National Biotech Group) en colaboración con el BIBP (Instituto de productos Biológicos de Beijing), y la lleva a cabo el doctor Cahn en la Fundación Huésped”.

Con respecto a la cantidad de dosis que debe aplicarse, afirmó que “me di dos y ya no quedan más por dar. Lo que consta ahora del estudio es la cuantificación de anticuerpos que yo voy a generar contra el Covid. Me sacarán sangre luego de la segunda dosis, dentro de un mes, para ver si estoy levantando la concentración de anticuerpos específicos en sangre contra el Covid y, de esa forma, evaluar si es efectiva o no la vacuna. En noviembre vamos a tener noticias si la vacuna es eficaz o no contra el virus. El estudio de la vacuna va a seguir a lo largo de dos años, durante ese período se va a testear como vengo de anticuerpos, para ver si la inmunidad dura en el tiempo. En el caso que sea efectiva, se empezará a comercializar a principios del año próximo, según Pfizer”.

“Todavía no puedo afirmar que soy inmune contra el Covid, esto se va a poder saber cuándo me cuantifiquen los anticuerpos y si se encuentran en una buena concentración. Son las inmunoglobulinas específicas contra el Covid y ahí se va a poder constatar que soy inmune. Como dije anteriormente, hay que ver cuánto tiempo dura la inmunidad. A lo mejor dura seis meses, un año, dos años. Lo importante es lograr una inmunidad que dure toda la vida, eso sería lo idea, como cualquier otra vacuna”, añadió.

Por último, Garbin destacó que “para eso se van a hacer los estudios en dos años y me van a ir testeando. El próximo mes me van a sacar sangre, la siguiente extracción viene a los cuatro meses, luego a los ocho y a los doce. Es cada cuatro meses durante dos años seguidos”, finalizó.