Kicillof, acompañado por intendentes y dirigentes bonaerenses, dejó La Plata para trasladarse a la sede del PJ, donde se ubicó en las primeras filas junto a figuras como Mayra Mendoza. Desde su espacio político, Movimiento Derecho al Futuro, el gobernador había publicado previamente un mensaje en redes sociales en el que denunciaba la persecución contra Cristina Kirchner y el peronismo: “¡Basta de perseguir a Cristina, basta de odio contra el peronismo! Llevan 80 años persiguiendo al peronismo por una sola causa: la justicia social. No nos han vencido”.
El acto, realizado en el Día de la Resistencia Peronista, conmemoró los fusilamientos de José León Suárez en 1956 y sirvió como plataforma para que el peronismo manifestara su unidad frente a lo que consideran una proscripción política contra la expresidenta. La presencia de Kicillof refuerza la estrategia de cohesión dentro del oficialismo, en un contexto donde la posible inhabilitación de Cristina Kirchner podría redefinir el mapa político de cara a las próximas elecciones.
El respaldo del gobernador bonaerense no solo se expresó en su asistencia al acto, sino también en la movilización de su estructura política. Funcionarios y referentes cercanos a Kicillof acompañaron la jornada, consolidando un mensaje de resistencia y apoyo a la exmandataria.
La incertidumbre sobre el fallo de la Corte Suprema mantiene en vilo al peronismo, que ya evalúa una gran marcha federal en caso de que se confirme la condena contra Cristina Kirchner. En este escenario, el respaldo de Kicillof se suma a una serie de movimientos dentro del oficialismo que buscan fortalecer la posición de la expresidenta y marcar una postura clara frente a la coyuntura judicial y política.