Entre los costados positivos de la oferta, resalta el de que el aumento es remunerativo e impacta en su totalidad en el sueldo básico de los y las trabajadoras, es decir el básico y el salario de bolsillo aumentan en el mismo porcentaje, impactando directamente en las jubilaciones y en las bonificaciones atadas al básico. Otra de las aristas a resaltar es el del aumento del porcentaje de la primera cuota a cobrar en marzo (pasó del 12% al 14% y en algunos sectores al 15%, según lo acordado en la última reunión).
Por otra parte, se elimina definitivamente la figura del presentismo, trasladándose la misma al salario. Se acordó, asimismo, el aumento de los montos de las asignaciones familiares, la apertura de paritarias sectoriales para los sectores más postergados y que en la primera semana de abril se convocará a una mesa técnica para la discusión de un nuevo Convenio Colectivo de Trabajo para los y las estatales bonaerenses, que dignifique y jerarquice la tarea de los mismos.
Para el secretario general de ATE Bonaerense, Oscar de Isasi, la propuesta es positiva. “Ahora, el desafío del gobierno es que este aumento no sea licuado por los precios. Por eso, creemos necesario un control de precios y tarifas para que este aumento no termine siendo depreciado y devaluado por los constantes aumentos. desde ATE Bonaerense nos comprometemos a respaldar toda medida del gobierno nacional y provincial que tienda a ponerle freno a los formadores de precio”.